Bueno, casi han pasado siglos desde la última vez que actualicé aquí. No es porque no los quiera, sino que sencillamente nadie lee esto... Así que no tenía caso. Pero esta vez es especial, necesitaba un sitio donde no me pudiera leer ÉL y creo que es el sitio más propicio. ¿Por qué no en un diario? Fácil: Tengo ánimos de usar el teclado y un archivo de word no resulta para nada inspirador. Generalmente habría escrito esto en DeviantArt, pero aparte del hecho de que esta persona es un contacto mío ahí también, habría tenido que escribir en inglés y por el momento no tengo ganas de hacerlo.
Empecemos por el principio ¿Qué me llevó a la situación actual? Muchos factores... Tendriamos que remitirnos a un año atrás apróximadamente, cuando lo conocí. ¿Amor a primera vista? Pfff. Cuando lo conocí pensé que era gay, no había duda en mi mente. Aún así, es algo que no me atreví a preguntar y de haberlo hecho tal vez ahora todo sería más simple. La cosa es que con el tiempo, comencé a pensar que no lo era... Es decir, hasta novia le conocí; tal vez solo era medio rarito... (Curiosamente ahora que busco "pruebas" de lo mismo, todas las fotos misteriosamente desaparecieron... ¿Me las habré imaginado?). Y bueno, ocurrió lo inevitable... bueno, posiblemente no fuera inevitable en realidad, pero al final ocurrió: me enamoré (O al menos creo que lo hice, es un punto que sigo debatiendome hasta la fecha). ¿Qué más podía pasar? Lo cierto es que nunca antes había conocido a alguien como él. Divertido, educado y caballeroso; tal vez no extremadamente guapo pero bastante agradable a la vista, los lentes eran un plus. Por si fuera poco los interéses comúnes eran bastantes: diseño, arte, literatura, videojuegos... Posiblemente el saber que una época se dedicaba a escribir fue lo que más me cautivó. Además, de alguna manera su influencia me iba cambiando poco a poco... En términos generales, diría que es una de esas personas que son como un sol; atraén a la gente a su alrededor sin proponerselo, con una sonrisa contagiosa y una personalidad agradable y en los cuales no puedes evitar confiar. Casi parecía un personaje sacado de un manga shoujo. Pero por supuesto, en enamoramiento no fue absoluto ya que aprendí a notar también algunos de sus defectos y finalmente aceptarlos (aunque se toma demasiado en serio el dicho de "más vale tarde que nunca").
Tras una continua indesción, en la que cada semana quería decirle y despues no hacer nada, finalmente tomé coraje para hacerlo... pasara lo que pasara, tenía la certeza de que no iba a volver incómodas las cosas; no es ningún niño inmaduro. Lamentablemente, mi valor fue... nulo, a la hora de hacerlo fuí incapáz, solo para terminar revelandolo minutos despues de nuestra despedida aquella noche... por teléfono. Fue entonces cuando mi martirio empezó.
Bueno, exagero... Pero de eso ya poco más de una semana y sigo sin una respuesta clara. Mi paranoía no ha disminuido demasiado y tengo demasiadas sospechas de que mi impresión inicial haya sido la correcta; por supuesto, eso no es algo que pueda preguntar... no a estas alturas, así que lo único que me queda es esperar por una respuesta directa de su parte.
Mientras tanto, mi corazón está clausurado por llamarlo de alguna manera. Me he puesto la meta de no pensar al respecto y aunque es bastante imposible no hacerlo, cada que inconcientemente mi mente vaga al tema, me esfuerzo por "clausurarlo", de alguna manera bloqueandolo con las bandas amarillas que ponen para cuidar una escena del crimen y con una sonrisa casi de burla a mi misma, procuro cambiar el tema de mis pensamientos hacia lugares más seguros... Y es que sino, la espera me volvería loca con todas las posibilidades que se me ocurren, cada una más desastroza que la anterior.
Mi único consuelo, es que en apenas un par de horas comenzará el NaNoWriMon... así que a echarle ganas para escribir como degenerada.